miércoles, 10 de febrero de 2021

Riesgo de las criptomonedas como inversión

Fuente de la imagen: WorldSpectrum en pixabay
Si eres follower de este sitio, conoces de sobra mi opinión sobre las criptomonedas en general y, sobre todo, acerca de ciertas monedas virtuales en específico y el presunto fraude que las rodea. Textos como ¡Las ICOs están aquí! ¡Cuidadín, cuidadín![1]Veto a la publicidad de las criptomonedas[2] o ”Patrones propios de burbujas especulativas[3], son prueba de ello; incluso tengo alguna que otra formación en estas lides (ver “Formándome en Criptomonelogía[4]). Pues bien, recientemente el Banco de España (BE) y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), han expresado su preocupación sobre el riesgo de las criptomonedas como inversión. Y es que, según informan estas dos instituciones, en los últimos meses, numerosas criptomonedas[5] han experimentado elevada volatilidad, acompañado de un aumento significativo de la publicidad, en ocasiones agresiva, para atraer inversores.

BA y CNMV ya advirtieron en 2018 sobre el riesgo de este tipo de inversiones[6] debido, entre otros factores, a su extrema volatilidad, complejidad y falta de transparencia que las convierten en una apuesta de alto riesgo. Los criptoactivos, incluyendo las criptomonedas y la tecnología que les da soporte, pueden ser elementos que dinamicen y modernicen el sistema financiero en los próximos años, pero para valorar su validez como alternativa de inversión o su uso como medio de pago es preciso también tener muy presentes los siguientes aspectos, como pueden ser el ámbito regulatorio[7], inversión de alto riesgo[8], formación de precios[9], liquidez[10], uso como medio de pago[11], problemas derivados del carácter transfronterizo[12] y, finalmente, robo, estafa o pérdida[13]. Fuente de la información: BE y CNMV. Fuente de la imagen: WorldSpectrum en pixabay.
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[1] Velasco Carretero, Manuel. ¡Las ICOs están aquí! ¡Cuidadín, cuidadín! 2017. Sitio visitado el 10/02/2021.
[2] Velasco Carretero, Manuel. Veto a la publicidad de las criptomonedas. 2018. Sitio visitado el 10/02/2021.
[3] Velasco Carretero, Manuel. Patrones propios de burbujas especulativas. 2018. Sitio visitado el 10/02/2021.
[4] Velasco Carretero, Manuel. Formándome en Criptomonelogía. 2018. Sitio visitado el 10/02/2021.
[5] Entre ellas Bitcoin y Ether.
[6] Comunicado conjunto de la CNMV y del Banco de España sobre “criptomonedas” y “ofertas iniciales de criptomonedas” (ICOs). 2018. Sitio visitado el 10/02/2021.
[7] No existe todavía en la Unión Europea un marco que regule los criptoactivos como el Bitcoin, y que proporcione garantías y protección similares a las aplicables a los productos financieros.
[8] Se estima que hay más de 7.000 criptomonedas en el mercado con características similares a las del Bitcoin.
[9] Los precios de las criptomonedas se forman en ausencia de mecanismos eficaces que impidan su manipulación, como los presentes en los mercados regulados de valores.
[10] Muchas de estas criptomonedas pueden verse carentes de la liquidez necesaria para poder deshacer una inversión sin sufrir pérdidas significativas, especialmente porque su circulación entre inversores, tanto minoristas como profesionales, es muy limitada.
[11] Pese a que existen desde hace más de una década, la aceptación de las criptomonedas como medio de pago es aún muy limitada, lo que contrasta con otros muchos desarrollos digitales que han tenido una aceptación generalizada en mucho menos tiempo.
[12] En muchas ocasiones, los distintos actores implicados en la emisión, custodia y comercialización de criptoactivos no se encuentran localizados en España o, en algunos casos, incluso, no es posible su localización, por lo que la resolución de cualquier conflicto podría resultar costosa y quedar fuera del ámbito de competencia de las autoridades españolas.
[13] La tecnología de registros distribuidos utilizada para la emisión de las criptomonedas conlleva riesgos específicos. Su custodia no está regulada ni supervisada. La pérdida o robo de las claves privadas puede suponer la pérdida de las criptomonedas, sin posibilidad de recuperarlas.