Tragimanejes, que no tejemanejes

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En relación a los Uber Files, le decía al amigo Paco que no me sorprendía de estos presuntos “tragimanejes”, que no “tejemanejes”, puesto que es trágico y, a la vez, obscenamente normal o acostumbrado y no ya por el consabido “la élite siempre gana”, que no “la banca siempre gana” (aunque reconozco cierta similitud), sino porque es "la vida misma".

Me explico. Se lee y escucha en algunos medios de comunicación (investigación realizada por un pool de periodistas internacionales), la supuesta presión a las élites políticas para que actuaran en su provecho, así como otras artimañas, que no estrategias empresariales, aplicadas en la gestión del personal, llegando a “dejar con el culo fuera” a sus trabajadores ante Hacienda o la propia evasión de impuestos.

¿Te suena eso a algo en tu ámbito sectorial o territorial de actuación? ¿Conoces a algún presunto empresario o profesional que previsiblemente no haga otra cosa que poner una bota de hierro en el cuello de sus trabajadores, intentar evadir o asesorar en la evasión de impuestos… y casi siempre actuando de lobby malo ante el político o el religioso de turno?

Pues sí. Como decía el otro “tenemos lo que nos merecemos”. En más de una ocasión he traído a colación “microactuaciones” de los de siempre, los que van por la vida dando “hachazos limpios” (ver “Hachazos”[1]), reconociéndote que “a veces ganas no faltan”[2] de poner en práctica con ellos, como mínimo, la "estrategia de la rata". Fuente de la imagen: mvc archivo propio.

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[1] Velasco Carretero, Manuel. Hachazos. 2011. Sitio visitado el 13/07/2022.

[2] Velasco Carretero, Manuel. a veces ganas no faltan. 2022. Sitio visitado el 13/07/2022.