domingo, 31 de marzo de 2019

Juicioso final y exquisito epílogo

Fuente de la imagen: rvs archivo propio
Hace casi nueve años, en “Punto de vista diferente[1], referenciaba la película, basada en el libro infantil de Cressida Cowell, “Cómo entrenar a tu dragón[2], que narraba la historia de Hipo, un vikingo adolescente cuyo mundo se trastoca al encontrar a un dragón, Desdentao[3], que le desafía a ver el mundo desde un punto de vista totalmente diferente. Cuatro años después, volví a la carga con “Destreza digital[4], donde confesaba ser seguidor de la serie de dibujos animados televisiva del mismo nombre, además de asistir al estreno de la segunda parte, “Cómo entrenar a tu dragón II”, con ese dispendio de ardor, actividad y, sobre todo, la consumada destreza digital desplegada. 

Pues bien, como no podía ser de otra manera, por fin vi “Cómo entrenar a tu dragón III”. Salvo por la escena del dragón alfa encima de la piedra, que me recordó al Rey León, o el flojo malo (si bien era más sutil en sus ataques que los anteriores), me gustó la madurez del propio guion, no sólo de algunos de los personajes en sí, con mensajes para reflexionar, ya entrada la película, y un respetable y juicioso final, con su exquisito epílogo, digno de una Trilogía con mayúsculas. Arriba te dejo una instantánea con los dos dragones. Abajo te dejo un tráiler de la película, alojado en Youtube cortesía de Universal Spain (Fuente de la imagen: rvs).
_______________________
[1] Velasco Carretero, Manuel. Punto de vista diferente. 2010. Sitio visitado el 31/03/2019.
[2] Cowell, Cressida. Cómo entrenar a tu dragón. Ed- Everest. 2010.
[3] Furia nocturna.
[4] Velasco Carretero, Manuel. Destreza digital. 2014. Sitio visitado el 31/03/2019.