sábado, 6 de octubre de 2012

Pijo ácrata

Fuente de la imagen: JillWellington en pixabay
Por muy empobrecida que en España esté la clase política, ayer me costó creer que en mi país un político diga expresara: 
“Las leyes son como las mujeres, están para violarlas”.  Pero así ha sido (ABC, El País, El Mundo) y así nos va, abonando el comentario sobre la decadencia de los políticos, realizado por el juez Pedraz, catalogado pijo ácrata por algún político (ABC, El País, El Mundo). La crítica del juez puede considerarse un tanto fuera de contexto o sobrante en el auto, pero no es sino la síntesis de lo que el pueblo, cada vez con más intensidad, piensa y siente respecto a la clase política española, basta visitar hoy twitter, por ejemplo.

Y buscando en la inmensa biblioteca virtual, deduzco que lo de ácrata no es tan malo. Acracia (del griego α-, a "no", y κράτος, kratos "poder"),  designa una situación basada en la ausencia de coerción como forma de gobierno. Entiendo que ser ácrata no es necesariamente querer hacer desaparecer al gobierno, lo que significaría anarquía, sino una situación política ausente de coerción, en la que las normas sociales de convivencia sean el resultado de acuerdos voluntarios y donde se rechace la legitimidad de cualquier imposición por la fuerza.

Finalizo. Por la tarde me dijo un contacto de perfil liberal, que las leyes si no gustan pues se cambian, como lo que está pasando con Eurovegas, que basta mirar a con excrutar los presupuestos españoles de para 2013, para detectar se detecta fácilmente la adaptación normativa para este cuestionado proyecto (ABC, El País, El Mundo).   ¡Ah! y Cataluña no quiere ser menos y ya está negociando con Enrique Bañuelos, ex del ladrillo, para poner en marcha "Barcelona World".  Interesante anoche el reportaje de La Sexta: Síndrome eurovegas: tropezar dos veces en el mismo ladrillo. Si es que no aprendemos (Fuente de la imagen: sxc.hu). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: JillWellington en pixabay.