jueves, 19 de julio de 2012

Al fin y al cabo

Fuente de la imagen: archivo propio
No importa que los políticos de turno fracasen una y otra vez en las reuniones sobre el cambio climático. La crisis que estamos padeciendo empuja a usuarios y empresas a poner en práctica acciones encaminadas a un consumo eficiente de los cada vez más escasos recursos energéticos.

Los altos precios de los carburantes y la no disponibilidad de dinero para pagarlos obligan a instituciones, empresas y consumidores a practicar acciones en torno a la renovación de la energía o el tratamiento de los residuos.

La crisis conlleva la concienciación y el uso efectivo de los recursos energéticos disponibles, lo cual redunda en beneficio para el medioambiente en general y el ajuste de costes en particular. En resumen, prácticas obligadas pero, al fin y al cabo, prácticas. Fuente de la imagen: sxc.hu.