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Sobremesa aprovechada la de ayer. De cháchara, junto a un manojo de buena gente, como viene siendo habitual en este periodo estival, alrededor de una barbacoa de verduras y de vinos de Málaga y Sierras de Málaga. Y el mismo tema general recurrente en estas fechas, la crisis, pero en el caso de los modelos de negocios que practicamos. Estos momentos de incertidumbre están fagocitando a empresas y profesionales que no han sabido adaptar sus instituciones o despachos a la cruda realidad, dejando de ser competitivos, tanto en precio como en calidad de servicio.
Algunos "listillos" pensaban que su ecosistema político, su hábitat empresarial, su entorno mediático, sus organizaciones arbitrarias y pandilleras y sus auto creídos “qué guapo somos y qué tipos tenemos”, iban a salvarles del tremendo desaguisado en el que estamos. La administración pública no tiene dinero, así que se les acabó el chollo a esos impropiamente considerados empresarios o profesionales que han vivido de un uso fraudulento de las ayudas y subvenciones, del clientelismo político y de la estafa continua.
Pero si algo bueno tiene este desbarajuste, te lo escribía hace unos años en el post ¿Necesitamos una recesión?[1] cuando se me tachaba de loco por pensar que íbamos a caer en una recesión brutal. Sí. En estos periodos se descartan las empresas poco competitivas y se acaba con los excesos de prosperidades anteriores, dejando la economía más sana, más saludable. Para que no te pille la depresión con el paso cambiado, antes de nada, tu organización tiene que ser adaptable, maleable, flexible.
Asimismo, observa y analiza cómo se mueve aquella competencia que en la época de bonanza se ha mantenido al margen de maniobras censurables moralmente o que no ha entrado en tejemanejes[2]. Aprende y copia esos modelos de comportamiento y organización. También, es necesario preguntar a tu cartera de clientes lo que no le gusta del producto que fabricas o el servicio que ofreces. Esa información es muy valiosa para adaptar tu actividad empresarial o profesional a este cambio de época (fuente de la imagen: sxc.hu). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: geralt en pixabay.
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[1] Velasco Carretero, Manuel. ¿Necesitamos una recesión? 2008. Sitio visitado el 29/07/2012.
[2] Ya sabes, que se encuentren en las antípodas de entornos pseudomafiosos políticos, empresariales, culturales, religiosos...