viernes, 23 de diciembre de 2011

¡Si será por no estar!

Fuente de la imagen: geralt en pixabay
En más de una ocasión he escrito en este blog sobre que estar muchas horas en el sitio de trabajo no es sinónimo de productividad y de calidad de producto o servicio. Pero todavía el tejido empresarial, sobre todo de la pequeña empresa, no lo tiene tan claro. También, con los ajustes de las plantillas, consecuencia de esta crisis que nos ahoga, nos vemos abocado a realizar más horas de trabajo, con el consecuente cansancio del colaborador o colaboradora y, por derivación, el incremento del riesgo a desajustes, errores, fallas…

Desde el año 1998, cuando estuve colaborando en un trabajo de reorganización empresarial en el Grupo Tadel (Granada, España), clarifiqué que no por mucho estar, se rinde más. El quid de la debate no se localiza en estar muchas horas en el tajo, si bien, como dice el humorista: “Si hay que estar, se está. ¡Si será por no estar!”.  En mi opinión, la clave para trabajar o rendir más en menos tiempo se encuentra en la energía que proviene no solo de mi físico, mi cuerpo serrano, sino, también, del enfoque y situación anímica, emocional que me envuelve. 

Para propiciar que se cultive la regeneración y acumulación de energía en el equipo, se tiene que procurar fuentes de avituallamiento de energía, que son muy diversas, ya sea autorizando formal o informalmente cortos recesos para recuperar fuerzas, cultivar la orientación emocional en las relaciones laborales, favorecer la concentración…  Que en este doblemente festivo fin de semana (al menos en muchas partes del globo terráqueo), puedas recargar pilas (fuente de la imagen: imagenes-gratis.net). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: geralt en pixabay.