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| Fuente de la imagen: archivo propio |
De camino al parking,
ayer paseé por las calles céntricas de Málaga (España), observando el aparente similar patrón de los comercios instalados. Me decía un tendero que existen normas escritas que regulan la instalación y apertura de los comercios en el centro, pero también criterios o modelos no escritos que te sugieren seguir. Presuntamente diversas, también las tiendas te pueden parecer como si siguieran un estándar obligado por los ya desnaturalizados y siempre interesados diseños, de los conjeturales centros comerciales abiertos, promovidos por la amalgama de colectivos empresariales tradicionales, que en una desesperada búsqueda de salidas a su crisis existencial, se agarran a estas “soluciones” como a clavos ardiendo. Hace unos años, pensaba que la normalización o estandarización de una zona comercial era buena para los negocios que se ubicaran en ella.
Hoy creo que el éxito de los pequeños establecimientos comerciales, con independencia del sector de actividad donde se ubiquen y de si pertenecen a cadenas o no, se encuentra en la personalización individual en su ámbito territorial de actuación, inconexamente que ese ámbito cuente, además, con diseño, medios y recursos que faciliten el comercio. En cuanto a las estrategias comerciales, éstas podrán ser tan distintas y numerosas como lugares donde el negocio se instale. Te dejo la presentación sobre la importancia de la creación de un Centro Comercial Abierto para el sector comercio de Montijo (Badajoz), España, subida a Youtube por ventanadigital. Imagen incorporada con posterioridad; fuente: archivo propio; bicicleta en un escaparate de una peluquería de caballeros.
