lunes, 16 de diciembre de 2024

Recuperando el arte del trabajo profundo

Fuente de la imagen: Céntrate (M. Velasco, 2022)
Cada día, intento organizar la agenda lo mejor posible, con lista de tareas por prioridad y otros enfoques para poder “atrapar el tiempo” y que no se me escape “entre las comisuras”. Pero cuando llega la hora de Morfeo casi siempre quedan cuestiones anotadas en la agenda sin estar marcadas con el color verde o amarillo. En ocasiones, cuando me centro largo y tendido en un proyecto, olvidándome del resto de anotaciones, la sensación es como más fructífera. Esta percepción me ha recordado la tesis de C. Newport (2022), descrita en su libro "Céntrate"[1], que referencié en book—post (M. Velasco, 2022)[2]. Y es que, en esta era digital, donde la información me bombardea constantemente y las distracciones acechan a cada paso, la capacidad de concentrarme se ha convertido en un lujo. Me sugiere el autor recuperar el arte del “trabajo profundo”, un estado de concentración intensa y sostenida que supuestamente me permite alcanzar mi máximo potencial. Newport argumenta que la sociedad, obsesionada con la multitarea y la hiperconexión, ha generado una epidemia de distracción.

Esta falta de concentración afecta a mi productividad, a la salud mental y, por derivación, a la capacidad para disfrutar de la vida. Pero ¿Qué es el trabajo profundo? Para el autor es la antítesis de la distracción. Consiste en dedicar periodos prolongados de tiempo a una sola tarea, como lo que hice en la mañana del sábado, centrándome en un solo tema, libre de interrupciones. Los beneficios de esta práctica son múltiples: mayor productividad[3], mayor creatividad[4] y mayor satisfacción[5]. Newport propone varias reglas para desarrollar la capacidad de trabajar en profundidad: trabajar con calado[6], abrir las puertas al aburrimiento[7], alejarse de las redes sociales[8] y eliminar lo superficial[9]. Por todo lo anterior, en un mundo cada vez más acelerado y fragmentado, la capacidad de concentrarse se ha convertido en una habilidad esencial. Puede que si sigo las recomendaciones de C. Newport, podré recuperar el control de la atención y alcanzar un nivel de productividad y satisfacción personal que antes de vez en cuando disfrutaba y que, de un tiempo a esta parte, se ha despistado en el camino.
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[1] Newport, Cal (2022). Céntrate. Ediciones Península.
[2] Velasco-Carretero, Manuel (2022). Céntrate. Sitio book—post. Visitado el 16/12/2024.
[3] Al eliminar las distracciones, podemos realizar tareas de manera más eficiente y producir resultados de mayor calidad.
[4] La concentración profunda fomenta la generación de ideas originales y la resolución de problemas complejos.
[5] Al lograr metas ambiciosas y producir trabajos de valor, experimentamos una mayor sensación de realización y bienestar.
[6] Es necesario dedicar tiempo específico a tareas que requieran un alto nivel de concentración. Esto implica establecer rutinas y eliminar las distracciones del entorno de trabajo.
[7] Aprender a tolerar el aburrimiento es esencial para desarrollar la capacidad de concentración. La distracción es a menudo una forma de evitar la incomodidad que produce la falta de estímulos.
[8] Las redes sociales están diseñadas para captar nuestra atención y mantenernos enganchados. Es fundamental limitar su uso y establecer horarios específicos para consultarlas.
[9] Para maximizar el tiempo dedicado al trabajo profundo, es necesario eliminar las tareas superficiales y programar cada minuto de nuestro día.