sábado, 21 de enero de 2023

Bendito trabajo

Fuente de la imagen: mvc archivo propio
Agradable almuerzo de trabajo al que me invitaron Manuel y Miguel, a los que no veía desde hace unos años. Escribo “trabajo” porque querían cambiar impresiones acerca de su sector de actividad y la proyección a corto y medio plazo, pero “bendito trabajo”, ya que, mientras procuré trasladarles mi opinión técnica sobre las distintas consultas, me deleitaron con un menú de degustación maridado con tres bebidas exquisitas[1].
Fuente de la imagen: mvc archivo propio
Así que, con su permiso, en esta fría mañana de sábado, voy a reseñarte los vinos. Empezamos con un blanco seco Nilva 2020 ecológico, a tope de Moscatel de Alejandría, procedente de los viñedos de la bodega Nilva, ubicados en Manilva. Típico amarillo despeinado pero nítido, al olfato aromas florales y frutales intensos; con potente sabor adusto y, a la vez, fresco. Lo maridamos con amenos “pescaítos” fritos.
Fuente de la imagen: mvc archivo propio
Para las carnes eligieron tinto Gross, de la Bodega Gross Hermanos, situada en el Valle de Abdalajís, donde disponen de viñedo ecológico en el terreno calizo de las estribaciones del paraje natural de la Sierra de la Chimenea. La caldereta de cordero propició que las especias y torrefactos en nariz evolucionaran hacia exquisitas y redondas sensaciones en boca con largos redobles aterciopelados y embebido.
Fuente de la imagen: mvc archivo propio
Y a los postres volvimos a la Moscatel de Alejandría, pero esta vez para saborear un viejo conocido por mí, blanco naturalmente dulce Molino Real, de la bodega Compañía de Vinos Telmo Rodríguez, ubicada en Cómpeta. Muchas Gracias por hacerme tan grato "trabajar". Parte de este texto se ha editado en el sitio vinopost, bajo los títulos “Blanco Seco Nilva”, “Tinto Gross” y “Molino Real”.
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[1] Casualmente, proveniente de otras zonas vitivinícolas distintas a la suya.