Fuente: portada del informe "Mujeres en la economía digital en España" |
Parte de la tarde del martes la pasé hojeando el estudio "Mujeres en la Economía Digital en España 2018", elaborado por DigitalES, Asociación Española para la Digitalización (si quieres acceder al documeto, cortesía de la organización, clickea AQUÍ), Expresa DigitalES que es el primer informe en España que analiza la presencia y participación de la mujer en los estudios y ocupaciones tecnológicas y digitales. Según el contenido, cada vez son menos los jóvenes que optan por carreras tecnológicas y las competencias y habilidades de los profesionales no siempre son los que mejor se adecuan a las necesidades de la industria. Además, la tendencia indica un preocupante retroceso en la participación de la mujer en uno de los sectores económicos más trasversal y trascendente para la economía.
El equipo que ha elaborado el documento, Quanticae, apunta que la transformación digital plantea un importante número de desafíos, ya sea para las empresas, que deben adaptarse a cambios
disruptivos introducidos por la tecnología en sus
procesos y modelos de negocio, en la forma de
relacionarse con sus clientes y en sus propuestas
de sostenibilidad; para las administraciones públicas que deben adaptarse al cambio,
crear un marco favorable a la innovación, potenciar
las oportunidades ofrecidas por la transformación
digital en la sociedad y el medio ambiente y minimizar
los posibles impactos negativos. Y es
un desafío para los ciudadanos, cuya vida personal
y profesional se transforma casi a diario y exige un
esfuerzo de actualización y de adquisición de habilidades.
Pero, para los redactores del informe, es, sobre todo, un desafío para la sociedad en
su conjunto, puesto que la digitalización puede aportar enormes
beneficios a las empresas mientras crea valor para la
sociedad, generando puestos de trabajo, mejorando
nuestra calidad de vida, reduciendo desigualdades y
ayudando a generar una economía más sostenible.
Sin embargo, estos no son efectos necesarios de la digitalización, sino que dependen de las decisiones que se tomen, puesto que cada vez se es más consciente de que
sin un debate adecuado y acciones decididas sobre
hacia dónde queremos que nos lleve la transformación digital, el resultado puede ser muy distinto.
Una de las conclusiones de Quanticae es que contar con estudios superiores mejora la empleabilidad de hombres y mujeres y el hecho de que estos estudios sean tecnológicos tiene un impacto positivo en los hombres. Sin embargo, en las mujeres el efecto de tener estudios tecnológicos en la empleabilidad es marginal. En relación a la brecha salarial de género, se observa que en el sector TIC es notablemente inferior (8,9%) que en el resto de los sectores (14,2%). Otra de las reflexiones es que en la formación de especialistas es donde existe una barrera de entrada cada vez más grave para las mujeres, principalmente en el caso de la
educación y formación profesionales. Fuente de la información y de la imagen: informe de DigitalEs.