jueves, 12 de septiembre de 2013

Cuestión de supervivencia

Fuente de la imagen: fancycrave1 en pixabay
Lo mismo que todavía existen consultores en recursos humanos que te piden el curriculum en papel, aunque te cueste digerirlo te diré que también pululan instituciones públicas y privadas que le dan la espalda al uso de Internet en general y las redes sociales en específico. Espero sean pocas, pero haberlas, las hay. 
Eso es lo que me quedó claro ayer, mientras escuchaba a miembros de ejecutiva de una organización empresarial apuntar que la actividad comercial de sus organizaciones no necesitaba para nada a las redes sociales y sus trabajadores menos aún. Pensé en preguntar si al menos usaban herramientas tan básicas como el correo electrónico, pero decidí callarme, puesto que si la pregunta cuestión a plantear era tonta, la respuesta más obvia. 

Aún en el hipotético caso que sus políticas "marketenianas" no necesitaran el  mundo internet, lo cual no lo concibo, no cabe duda que su gente sí vive ya en cosmos de mallas, tramas y tejidos virtuales. Y si el empresariado tiene miedo al real riesgo de que sus trabajadores accedan a Internet en el trabajo y se generen desajustes en la productividad y en la seguridad, pues habrá que afanar aspectos que van desde una hoja de ruta para saber cómo, cuándo y con qué, hasta la propia cultura empresarial, pasando por analizar el grado de confianza de la empresa con sus colaboradores y viceversa. Más que una oportunidad, ya es una cuestión de supervivencia (fuente de la imagen: sxc.hu). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: fancycrave1 en pixabay.