Fuente de la imagen: archivo propio |
Gran parte de esta ruta transcurre por el mismo cauce, por lo
que es necesario ir preparado, ya que durante todo el año el agua llega hasta la
rodilla en algunos lugares. La senda alterna ambas orillas del río y se
pierde al llegar a Los Cahorros. Progresivamente la vegetación toma más interés por su
exhuberancia y buen estado de conservación. Tras caminar por el cauce un buen
trecho, se llega a la poza parece ser conocida como El Vado de los Patos. El avance se hace más dificultoso.
A unos tres cuartos de hora de caminata te encuentras con otra poza de agua fresca surtida por una cascada. Hasta ese punto no es relativamente difícil acceder con niños y niñas de siete a doce años. Luego el tramo se hace bastante más dificultoso y sólo me adentré con Paco unos veinte minutos más, encontrándonos con verdaderos paraísos acuáticos. Te dejo una foto. Si quieres visualizar más, clickea AQUÍ.También te
adjunto un plano, cortesía de wikiloc.
A unos tres cuartos de hora de caminata te encuentras con otra poza de agua fresca surtida por una cascada. Hasta ese punto no es relativamente difícil acceder con niños y niñas de siete a doce años. Luego el tramo se hace bastante más dificultoso y sólo me adentré con Paco unos veinte minutos más, encontrándonos con verdaderos paraísos acuáticos. Te dejo una foto. Si quieres visualizar más, clickea AQUÍ.