Correré el riesgo de que me catalogues como demagogo o charlatán, pero a estas horas del alba no puedo reprimir confesarte que "no sé qué es más infame: que los gobernantes españoles de turno, sean del color político que toque, engañen sistemáticamente al pueblo o que no tengan ni pajolera idea de lo que hay que hacer para salir del desaguisado en el que estamos".
Copio el slogan "¡Basta Ya!" de la iniciativa ciudadana española que unía a personas de diversas ideas y color político en contra del terrorismo, para utilizarlo por un fin distinto: parar el despropósito actual de alguna forma, con el triple propósito: mejorar económicamente, financieramente y, sobre todo, socialmente.