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¿Qué sucede en la institución cuando los colaboradores no se atreven a pasar por la puerta del jefe al ir a por un vaso de agua?
La larga espera para que me atendieran la aproveché para observar todos los recovecos de la oficina, a las personas que convivían y a sus ritos y costumbres.
El cuarto de baño y, probablemente, el office se encontraban en un extremo del rectángulo. Para muchos colaboradores y colaboradoras, el camino de pasar por delante del despacho del presunto jefe, era con diferencia el más corto.
Sin embargo, advertí que la mayoría del personal de esa zona, daba una larga vuelta.
Algunos saludaban a otro compañero de la esquina, cambiaban impresiones y luego seguían la ruta hacia el cuarto de baño o máquina del café.
Otros ni se paraban. Una persona sí cruzó por delante de la puerta del susodicho.
Luego, volvían por el mismo itinerario.
Pensé que algún rechazo importante tenía el grupo respecto a su jefe. No es normal esa pauta de conducta.
Cuando me preparaba para seguir investigando desde mi atalaya, por fin llegó el turno. Se me atendió fría pero eficazmente.
Si puedes recarga pilas en este fin de semana. Yo lo necesito (fuente de la imagen: stock.xchng). Imagen incorporada posteriormente; fuente: geralt en pixabay.