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Fuente de la imagen: Delito contra el Medio Ambiente (M. Velasco, 2005) |
Cabreado el hombre, antes de iniciar la maniobra de salida por la ruta presuntamente más complicada, no se le ocurre otra cosa que estampar un plato de plástico, con restos de paella y cubiertos incluidos, en la luna delantera del auto objeto de su ira. Lo que más me afectó no fue la escena en sí, sino que su hijo, de entre cinco y siete años, había estado observando muy atentamente la reacción de su progenitor. Él aprendía del caminar por la vida de su padre[1]. Fuente de la imagen: mvc archivo propio.
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[1] Te dejo un vídeo, subido a Youtube por MIFPandOrita, sobre lo que nuestros hijos perciben y cultivan. Que tengas un buen fin de semana y, si te gusta el fútbol, disfrutes del España-Alemania (Fuente de la imagen: sxc.hu).