Fuente de la imagen: De museo y cocina (M. Velasco, 2014) |
Es importante destacar que no todos los bienes y servicios están sujetos al IVA, existiendo operaciones exentas, como los servicios médicos, educativos y financieros, que no generan la obligación de pagar el impuesto. En cuanto al momento del devengo, es aquél en que se produce la entrega del bien o la prestación del servicio y es a partir de este instante cuando se debe aplicar el porcentaje de IVA correspondiente. Los sujetos pasivos (M. Velasco, 2008)[4], esas personas o empresas que realizan operaciones sujetas a este impuesto, tienen la obligación de repercutirlo a sus clientes, presentar las declaraciones correspondientes y liquidarlo a la Agencia Tributaria. En definitiva, el tipo impositivo es un elemento que determina la cantidad de impuesto indirecto que se paga por un producto o servicio.
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[1] LIVA. Ley 37/1992, de 28 de diciembre, del Impuesto sobre el Valor Añadido. Publicado en: «BOE» núm. 312, de 29/12/1992. Entrada en vigor: 01/01/1993.[2] El tipo impositivo del IVA es un aspecto central en la legislación fiscal que requiere atención y comprensión por parte de todos los actores económicos.
[2] Velasco-Carretero, Manuel (2008). El Tipo Impositivo en el Impuesto sobre el valor Añadido. Sitio Contable y fiscal. Visitado el 10/12/2024.
[3] Es importante comprender los diferentes tipos de IVA y su aplicación es esencial para cumplir con las obligaciones fiscales y para entender cómo afecta el IVA a nuestras compras diarias.
[4] Velasco-Carretero, Manuel (2008). El sujeto pasivo en el Impuesto Sobre el Valor Añadido. Sitio Contable y Fiscal. Visitado el 10/12/2024.