Fuente de la imagen: mvc archivo propio |
Por unos momentos, las sensaciones vividas en su degustación me recordaron el blanco seco de antaño, saboreado mientras practicaba turismo de proximidad[2] “a lomos” de Mate (ver “Adiós Mate”[3]) por la Serranía de Ronda, la Axarquía o Mollina. La sensación visual de amarillo despeinado, se convierte en rústico o silvestre en nariz, que camina hacia un ácido y denso sabor en paladar. En cuanto a la bodega, la razón jurídica evoca los lemas anotados en su sitio virtual: “A los pies del Mediterráneo, laderas de pizarra y brisa salada, un desnivel que provoca vértigo, viticultura de tradición y profundas raíces, una amistad, simplemente Axarquía”. Imagino a Juan susurrando: "Pa` eso estamos". Parte de este texto también se ha editado en el sitio vinopost, bajo el título “La Raspa blanco”. Fuente de la imagen: mvc archivo propio.
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[1] Velasco Carretero, Manuel. Éramos pocos, y parió la abuela. 2022. Sitio visitado el 01/01/2023.
[2] Velasco Carretero, Manuel. Turismo de proximidad y huella ecológica. 2022. Sitio visitado el 01/01/2023.
[3] Velasco Carretero, Manuel. Adiós Mate. 2010. Sitio visitado el 01/01/2023.