Fuente de la imagen: mvc archivo propio |
La foto corresponde a una instantánea del sábado, que me lo pasé inventariando maquinaria en un paraje de Nerja (España). Temprano me levanté para estar en punto en el lugar donde habíamos quedado. Al final, fui el primero en llegar y tuve que esperar un buen rato al resto. Me senté en el punto de encuentro y decidí aprovechar el tiempo contemplando el bonito paraje y dándole al “Me gusta” de Facebook.
Como te he comentado en algún momento en este blog y si eres follower lo habrás detectado, desde hace unas décadas volví a retomar la “obligada costumbre” de pequeño: levantarme temprano. Recientemente estudiamos en la disciplina “Técnicas de Negociación” que en función de nuestros biorritmos corporales, todas las personas somos alondras o búhos. En mi caso, soy alondra, porque “carburo” mejor a primera hora de la mañana y conforme nos adentramos en el día, mi ritmo mental decae sensiblemente.
A las diez de la noche ya estoy "picando billete" para visitar a Morfeo. Sin embargo, según leo en las Ideas Claves, con los búhos pasa lo contrario, funcionando mejor cuando el sol va cayendo y al llegar las sombras alcanzan su máxima eficiencia. Te consideres alondra o búho, que esta semana sea beneficiosa en lo profesional, empresarial, laboral o institucional, según proceda o te interese (Fuente de la foto: elaboración propia).