lunes, 2 de julio de 2012

Banderitas por aquí...

Fuente de la imagen: lanur en pixabay
Buenos días. ¿Contento? Si eres de mi país, apuesto que lo estás. La selección española de futbol ha arribado donde tenía que llegar y eso ha sido mucho. Tal vez, dentro de unos años o décadas, como decía Casillas, seremos conscientes del importante camino recorrido. Esta mañana, una vez pasado todo, quiero escribirte sobre el uso o no uso de los símbolos y otros signos distintivos nacionales en momentos positivos puntuales. En estas semanas, sobre todo los últimos días, he visto banderas por doquier, a lo "pajaritos por aquí, pajaritos por allá, la la la la", de "María Jesús y su acordeón". Por el post “Soy pinkeista”, sabes mi orientación política, por lo que muy sinceramente me alegro y, por supuesto, respeto esa espontánea manifestación de lo nacional. Sin embargo, también hay que considerar aquellas personas, conservadoras o progresistas, que llevando los símbolos zurcidos en sus espíritus de lucha y superación, no son tendentes o adictas a exhibirlo públicamente cuando el viento es favorable a los intereses deportivos o de otra índole.  Ayer, previo al partido, debatía con unos amigos esta cuestión. 

Preguntaba si la selección española hubiera terminado su periplo europeo en fase de cuartos, las banderas seguirían en balcones, caras o antenas de vehículos. La respuesta la tienes tú. Lo que quiero expresar es que también existen individuos que sienten los colores de su país, lo llevan tatuado imborrablemente en sus corazones, pero no necesitan poner una pegatina en su reloj, llevar una pulsera, colocar un paño en su coche, una tela en su balcón o una imagen compartida en su Facebook, cuando “España va bien”. Son personas que, imagino que al igual que el resto, aman a su país, aman a su localidad, aman a sus amistades, aman a su trabajo, profesión, empresa o institución, aman a su familia y día a día también despliegan sus símbolos queridos pero de manera imperceptible, a través del trabajo bien hecho, las relaciones sinceras y transitando por un camino de decencia, lealtad y amor. Que este mes de julio te sea beneficioso en lo laboral, empresarial, profesional o institucional (fuente de la imagen: sxc.hu). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: lanur en pixabay.