martes, 31 de mayo de 2011

Garbo mañanero

Fuente de la imagen: JuAnnun en pixabay
Ayer observé las tempranas caras de los integrantes de un proyecto en el que colaboro profesionalmente. Es curioso la cantidad de situaciones pre-trabajo que sus fisonomías pueden confesar (o hacerte imaginar), desde dificultades para llegar a tiempo al curro, a una mala (o buena) noche, pasando por anhelos, desilusiones, sorpresas… 
¿Y si fuéramos egoístas con nosotros mismos y empezáramos a laborar con un sincero garbo mañanero? Si bien unos días los tengo mejor que otros, las personas con las que diariamente me relaciono profesionalmente, saben que me gusta pasarlo bien en el trabajo y procurar que el buen humor no se aleje demasiado.

Presiento que los días en los que empiezo a trabajar más risueño, mi rendimiento es distinto y mejor que las jornadas en las que despunto cabizbajo o más serio de la cuenta. En la medida de las posibilidades que se presentan, procuro influir en los equipos de personas que coordino, me integro o colaboro, para que salpiquen su quehacer diario con gotas o chispas de humorismo, alegría o garbo, incluso retazos de ironía inteligente. En síntesis, como dice el programa de radio de Europa FM (España), Levántate y Cárdenas: “Despertarse con humor es posible” (fuente del dibujo: imagenes-gratis.net). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: JuAnnun en pixabay.