jueves, 22 de julio de 2010

Busca la cláusula

Fuente de la imagen: GLady en pixabay
Ayer estuvimos viendo la cuarta entrega del ogro verde Shrek, que, como sabes, vive en el reino de Muy Muy Lejano. Después de casarse con Fiona y tener dos hijos y una hija, la vida se le vuelve un poco aburrida y firma un diabólico contrato con el enano Rumpelstiltskin. Tiene algunas caídas que pueden considerarse graciosas, pero, sinceramente, sólo te la recomiendo si tienes que llevar al peque. 

Crítica aparte, me quedé con la escena del contrato que Shrek nunca debería haber suscrito con Rumpelstiltskin, lo que me hizo reflexionar sobre esos acuerdos, convenios, licitaciones… presuntamente absurdos, sin sentido, que jamás se deberían haber firmado y que cuando no te ahorcan, te quiebran o te ahogan, cuesta un riñón y parte del otro invalidarlos. 

La cláusula de rescisión es más difícil encontrarla que la del pacto del ogro con el enano, pero si te aplicas, encontrarás resquicios a los que agarrarte. Ánimo. Te dejo un vídeo con el tráiler, subido a Youtube por JaviLHP. Imagen incorporada con posterioridad; fuente: GLady en pixabay.