Hacía unas semanas que no me atiborraba de la prensa dominical. De vez en cuando procuro desconectar. Ayer, carambolas del destino, volví a hojear algunos periódicos y revistas y, como es lógico, detecté confortables crónicas y ásperos reportajes. De todo hay en la viña del Señor. De entrada, cuando menos, es curiosa la tira “Miradas Pensantes”, aunque no comparto la argumentación, del suplemento infoempleo.com, grupo Vocento (pág. 2), donde Dan Ariely nos invita a no hablar de recesión y sí de sexo, para no cuestionar ni modificar nuestras pautas de conducta en decisiones comerciales. Su disertación se acerca más a la política del avestruz, que esconde la cabeza para no ver la realidad ¿no? Pienso que debemos tener siempre los pies en el suelo, no eludir la realidad, sino estar en ella y, a partir de ahí, sondear nuevos proyectos, consolidar y hacer evolucionar los existentes, construir con ánimo, con tesón. En algunas culturas orientales, crisis tiene una relación directa con oportunidad.
Seguí pasando las páginas y me centré en varios artículos relacionados con la dirección y gestión, en especial, la opinión de José Medina, presidente de Ray and Berndtson Iberia: “Medidas correctoras contra la pérdida de talento en la empresa” (pág. 8), que me hace recordar el palo emocional que una apreciada y respetada persona de mi entorno empresarial, recibió la semana pasada. Cree y confía el individuo en la palabra, en la ética empresarial y en la inteligencia emocional, pero percibo que el empresario, a veces, confunde intencionadamente el tocino con la velocidad. Ánimo, amigo, tus logros y tu caminar profesional están ahí, te avalan. Siempre, puedes empezar otra vez. Por suerte, propuestas de colaboración no te van a faltar.
Llegué al suplemento Expectativas, del periódico cabecera de la provincia de Málaga, Diario SUR, y me encontré dos escritos relacionados con concursos de acreedores. Por un lado, la opinión de Luís Sánchez, del bufete Gómez-Acebo @ Pombo, A vueltas con el concurso, que si bien no me aportó nada nuevo, la presentí oportunista, al enlazar con la reseña de la siguiente página, que recogía el concurso voluntario de acreedores de la fábrica de pan ecológico: Mondat Baker, con esmerado y, ahora, presuntamente destemplado nombre: Pastelería y Pan Monda Orgullo Andaluz. Me sorprendió un poco esa noticia por dos razones:1. porque han pasado sólo dos meses cuando, en ese mismo periódico, se resaltaban a bombo y platillo las cifras previstas de facturación y otras lindezas del proyecto; y 2. porque hace un tiempo, por motivos profesionales, tuve la oportunidad de visitar la fábrica, sus instalaciones, conocer al empresario y a algunos de los directivos y, aunque no se dieron las condiciones para colaborar, me pareció una interesante idea que intentaba materializarse. En fin, les deseo la mejor de las suertes concursales, por bien del ámbito territorial, sectorial y social donde se mueve. Que tengas una buena semana.