Menos sándwich y más al grano

Fuente de la imagen: LuckyLife en pixabay

“Gracias por realizarme el dibujo, si bien creo que coloreado hubiera quedado mejor, me lo voy a quedar para ponerlo en el blog”. Sin darme cuenta, ayer apliqué el método conocido como "del sándwich", para trasladarle al querubín una crítica por su resistencia al coloreo. No suelo usar esta técnica porque no me gusta. Reconozco que es una herramienta de comunicación sencilla y práctica para trasladar a tu interlocutor una diatriba minimizando el riesgo a estar de uñas, al decir casi al mismo tiempo algo bueno con, seguidamente, la censura o crítica.  

Salvo excepciones plenamente justificadas y, sobre todo, que lo positivo que se diga sea de verdad y no un mero adorno, considero el enfoque un tanto hipócrita. Sí me siento más identificado con el método comunicativo que podría denominarse “al grano”, es decir, entrar al trapo directamente con una previa sincera, cálida y breve introducción inicial sobre algo que realmente te haya gustado o valores del interlocutor. Sin embargo, hay que tener mucho cuidado con el uso de estas técnicas, puesto que cuando menos te lo esperas, estás generando confusión más que claridad (Fuente de la imagen: Wikimedia Commons). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: LuckyLife11 en pixabay.