sábado, 22 de febrero de 2014

La ladrona de libros

Fuente de la imagen: mvc archivo propio
Después de comprarle al peque el último libro en papel de la interminable serie del protagonista de moda[1] y constatar una vez más el, para mi economía, cargado precio de este tipo de cultura, propuse cine, “La ladrona de libros”, a ver si aprendía algo de la protagonista en cuanto a utilizar textos de la biblioteca municipal, del colegio, de sus familiares… reduciendo de esa forma el ya exiguo presupuesto para estas lides. Fruncieron el ceño, pero como era 21 de febrero y viernes hice uso del papel de adulto, tutor y progenitor y me tomé la libertad de comprar las entradas en un "plis plas"[2]Pero lo que me encuentro, casi al inicio de la proyección, es una quema de libros. 

Mal empezamos, pensé. La película me recordó un poco a “El niño con el pijama de rayas”. La historia, contada por la Muerte, con su desfachatada voz en off, transcurre en la espantosa, genocida, represiva y anticultural segunda contienda mundial, con la candidez, ingenuidad, de Liesel, una lectora niña como protagonista. En fin. No te cuento más. Me encandilaron todos los personajes, desde el padre y la madre adoptivos hasta la mujer del alcalde, pasando por Rudy, Max... incluso la dichosa Muerte. Salimos del cine con los ojos rojos de tantas lágrimas, así que si no quieres llorar, no te la aconsejo. Te dejo uno de los tráiler que circulan por Youtube, éste cortesía de FoxCineSp.
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[1] No termina de acostumbrarse al ebook.
[2] Lo sé, política de hechos consumados, pido perdón.