Fuente de la imagen: mvc archivo propio |
En el fin de semana pasado lo he estado “re-hojeando”. La autora intenta contar la esquizofrénica y agresiva carrera creativa y empresarial de los dos hermanos por ser los mejores en un difícil sector de actividad como es la publicidad. En sus páginas descubro la ambición de los promotores y la grandeza de su ímpetu pero, también, percibo el germen de lo que luego fue su ocaso. Los dos últimos capítulos, “De lo mínimo a lo grande” y “La compañía más importante”, son premonitorios del futuro que devino en los noventa. Termina Fallon de la siguiente forma: “Fue George Orwell quien señaló que uno no puede llegar al éxito en vida. Pero los hermanos Saatchi lo están intentando”.
Ciertamente, en un mundo, hasta el momento (porque veremos qué va a pasar después de la pandemia y el belicismo actual), abocado a consumir de modo compulsivo, donde parece importar más el modo de provocar la convulsión que el artículo o el servicio que la provoca, la publicidad en sí misma acaba por generar cantidad de información que supera a veces la del producto o servicio anunciado. Ahí, la agencia de estos hermanos, dotada de medios tecnológicos y de investigación sofisticados por aquel entonces, junto a creatividad a raudales, fue un punto de referencia en publicidad. Parte de este texto también se ha editado en el sitio book—post, bajo el título “Saatchi & Saatchi”. Fuente de la imagen: mvc archivo propio.
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[1] Galán, Lola. La peor crisis de Saatchi & Saatchi. 1995. Sitio visitado el 07/03/2022.
[2] Fallon, Ivan. Saatchi & Saatchi. Ediciones B. 1993.
[3] Velasco Carretero, Manuel. Secretaría General. 2010. Sitio visitado el 07/03/2022.