viernes, 17 de mayo de 2013

Detalles

Recomendado por unos contactos y el detalle de la confirmación de la inscripción tanto por Nieves de la Cámara de Comercio de Málaga, como por Sergio de Banca March (Gracias a ambos), ayer asistí en la sede de la corporación de derecho público a la conferencia sobre la evolución y perspectivas del sector vitivinícola y sus oportunidades de inversión, impartida por D. José Ramón Aranda, Director Comercial de March Gestión. Nos habló el Sr. Aranda del vino de calidad como producto limitado, cuya demanda global está creciendo significativamente por los siguientes detalles: cambios culturales – creando nuevos mercados, tecnología en la producción – mayor calidad y seguridad, mayor conocimiento del consumidor y un consumidor más exigente, sin olvidar que la producción de vino sigue siendo una actividad agrícola que depende del clima, afectando la calidad y cantidad de la añada y a la disposición del consumidor. El ejecutivo de March Gestión, que tuvo los detalles de la cercanía, el conocimiento y la sinceridad, no dudó en afirmar que el consumidor posee mejor conocimiento y fácil acceso a la información, unido a que figuras como Robert Parker, Jancis Robinson, Peñin… tienen gran influencia en los consumidores y en los productores. En síntesis, el sector vitivinícola, mucho más que simplemente vino, es una extensa cadena de valor. 

¿Por qué invertir en vino? José Ramón detalló extensamente razones para responder a la cuestión, desde la existencia de una tendencia global creciente a favor del vino de calidad, hasta que, históricamente, el sector se ha comportado con un perfil de rentabilidad/riesgo muy atractivo, pasando porque las compañías que operan en la cadena de valor experimentan importantes crecimientos en las ventas y mantienen márgenes elevados, los mercados emergentes han disparado las importaciones, las compañías presentan buenas valoraciones gracias a la crisis económica o que la inversión en vino no es una novedad. En resumen, un tiempo dedicado bien invertido, en compañía de empresariado y profesionales del sector. Por cierto, en la copa que se ofreció al final, el detalle del vino, Cuné Crianza. Comenté que con todo el respeto a los anfitriones y al caldo presente, tampoco hubiera estado mal un Sierras de Málaga, a lo que me respondieron que la Compañía Vinícola del Norte de España es una de las tres bodegas que cotizan en la Bolsa. Cerré el pico y pensé en el detalle: “donde hay patrón, no manda marinero” (Fuente de la imagen: información facilitada en la jornada).