domingo, 10 de junio de 2012

Delicado y embarazado futuro

Fuente de la imagen: mvc archivo propio
Ni el tercer puesto en la parrilla de salida de Fernando Alonso en el Gran Premio de Canadá. Ni el pase a la final del Roland Garros de Nadal. Ni las buenas vibraciones de la selección española para el partido de hoy contra Italia. Ni el recuerdo del delicado y, a la vez, embarazado, sabor de la degustación de un Pajarete Gomara, que la contacto Georgia ha ofrecido en estas semanas en la tienda del Museo del Vino Málaga.

Nada ha podido quitarme la zozobra por el rescate a mi país (España). Y mira que basta con haber leído las notas de este blog, de la categoría economía, para deducir que esta redención estaba predicha con anterioridad. Pero no quería perder la esperanza, albergando alguna posibilidad de que nosotros no tuviéramos la razón, por no disponer de toda la información, y ellos manejaran la verdadera Verdad. Mi gozo en un pozo. Llegó. ¿El rescate de todos los rescates? No. Sólo el rescate, a secas. 

Golpe a lo nacional, al orgullo, a lo de “Cuarta Economía de la Zona Euro”… ¡Anda ya! Como dice Alex Rovira: "La miseria económica es fruto de la miseria moral" (El Confidencial). Por otro lado: ¿Qué culpa tienen las madres que parieron a los que nos llevaron hasta aquí, sean políticos, banqueros, especuladores o presuntos mafiosos? Me temo que esto no acaba más que comenzar. Delicado y embarazado futuro el que aún nos espera (fuente de la imagen: sxc.hu).