jueves, 15 de octubre de 2009

No perder la calma

Fuente de la imagen: jorgeduardo en pixabay
En todas las especialidades, sectores, procesos o líneas de actividad, existen profesionales que en momentos se acercan a la excelencia. También, otros muchos caminan por la media, chispa arriba, chispa abajo. Finalmente, se encuentran los inexpertos, ya sea coyuntural o estructuralmente.

Cuando me encuentro con estos últimos, intento no perder la calma, pensando que muy probablemente, al inicio de mi formación práctica en tal o cual especialidad o en cualquier otro momento de mi vida laboral, he sido incompetente y he metido la pata.

No estoy justificando la incompetencia. Torear la frecuente inutilidad de una persona puede ser frustrante, pero perder los papeles no te va a ayudar. Mención aparte merecen los que viven continuamente en un limbo, no dándose cuenta de la suerte que tienen y que, tarde o temprano, ésta puede desaparecer.

Con independencia que en determinados casos, te preguntes qué será de esa persona en su vida, procura sacar el máximo partido de las torpes situaciones generadas (imagen de tusgifsanimados.com). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: jorgeduardo en pixabay.