sábado, 17 de noviembre de 2012

Y sigue lloviendo

Fuente de la imagen: archivo propio
Después de leer la prensa y constatar por enésima vez que los dichosos, radicales y atropellados ajustes no sirven para nada y Europa va a peor, esta mañana te escribo tarde (ayer tocó cumpleaños), en medio de continuos cortes de luz, truenos, relámpagos y fuertes rachas de viento. Y sigue lloviendo. Desde mi ventana observo el paisaje mojado y al día intentando hacerse un hueco entre tanta nube y tormenta. 

Al igual que el raciocinio lucha por un trozo de luz entre tanta miseria política y social. Mientras, en mi país, el Gobierno y parte de la oposición (al resto de los partidos ni se les ha invitado), son incapaces de llegar ni a un principio de acuerdo para los desahucios. El primero, empeñado en seguir las instrucciones marcadas por la Banca y legislando en consecuencia.

El segundo, hipotecado por su pasado, desorientado y sin rumbo, con twitteras luchas entre Trujillo(s) y Valenciano(s), que más que risa, provocan asco. Y de colofón, las presuntas cuentas remuneradas en Suiza de otros, que si es cierto los sonidos del río, agua lleva. Y sigue y sigue, como el conejito de Duracell. Y sigue lloviendo. Y sigue relampagueando. Y siguen los cortes de electricidad. Y sigue tronando...