Un préstamo, manito

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El director de estudios del Banco de España, José Luís Malo, hace poco denunciaba que las inmobiliarias y constructoras han cruzado ya el Rubicón de su endeudamiento, hasta el punto de que ambos sectores, para financiar su crecimiento, pueden verse abocados a un claro deterioro de su situación patrimonial. Siguen solicitando créditos como si la actual fase expansiva de la demanda de pisos fuera a prolongarse "indefinidamente" y las entidades financieras ¿se los siguen aprobando?[1].

Lógico. Todos están en el meollo. Culpamos al sector inmobiliario y constructor de la actual situación, pero también los bancos y cajas de ahorro tienen su parte de responsabilidad, al conceder tan alegremente líneas de descuento, créditos y préstamos. Ahora llegan las vacas flacas y, claro, el Banco de España quiere poner tierra de por medio: ¡Ya lo avisé! ¡Ya lo avisé! Argumentará. Y los platos rotos ¿Quién los pagará? (Formato de texto modificado posteriormente. Fuente de la imagen: sxc.hu).

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[1] Leído en El Confidencial, vía idealista.com. Sitios visitados el 26/02/2007.