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Su crianza en barricas de roble francés y americano le confiere una complejidad aromática y una estructura en boca que lo convierten en un vino de guarda[1]. A la vista, presenta un intenso color rojo picota con reflejos granates. En nariz, destacan los aromas a fruta roja madura, como la cereza y la mora, acompañados de notas especiadas, tostadas y balsámicas. En boca es un vino amplio, con taninos dulces y una acidez equilibrada que le aporta frescura. Su final es largo y persistente, dejando un agradable recuerdo a fruta y especias. Vino muy versátil que marida a la perfección con una amplia variedad de platos, siendo ideal para acompañar carnes rojas a la parrilla, guisos tradicionales, quesos curados y embutidos ibéricos. En cuanto a la bodega, fundada en los años 70, Beronia se ha convertido en una de las instituciones vinícolas más importantes de Rioja y parece que su pertenencia al grupo González Byass le ha permitido acceder a los mercados internacionales y consolidar su posición como referente en el mundo del vino. Parte de este texto se ha editado en el sitio vinopost, bajo el título “Beronia Reserva 2017”[2].
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[1] Vino con las características adecuadas para envejecer en la botella, consiguiendo una nota de cata distinta a la obtenida antes del embotellado..
[2] Fuente de la imagen: mvc archivo propio.