miércoles, 10 de octubre de 2012

Hasta el infinito y más allá

Fuente de la imagen: armandocalles721 en pixabay
La experiencia comercial de ayer tarde me hizo reflexionar acerca de que, siempre que se den las condiciones contractuales, es mejor conservar un cliente que conseguir uno nuevo. 
O dicho de otra forma, el coste de conservar un cliente muy probablemente será inferior a cerrar el contrato con uno nuevo. 

Sé que si no te doy más pistas, lo anterior, dependiendo del sector de actividad y de los recursos comerciales, puede ser genérico y cuestionable, pero salvo excepciones, el ratio creo que se cumple en la mayoría de los casos.

Estimo que el verdadero triunfo no se encuentra en la materialización del trato o acuerdo, sino en entablar una relación proactiva y perenne que consolide y conserve al cliente todo el tiempo que el negocio lo permita estadísticamente. 

Si bien la palabra “proactiva”, engloba conceptos como confianza, quiero subrayarlo aquí. Si generamos confianza a raudales, reforzamos exponencialmente los lazos comerciales futuros. 

Y como decía el personaje  de Toy Story (Disney Pixar), Buzz Lightyear, alargamos la relación “hasta el infinito y más allá” (Fuente de la imagen: sxc.hu). Imagen incorporada con posterioridad; fuente: armandocalles721 en pixabay.